Para empezar tengo que aclarar, que condeno totalmente la irracional acción de éstos extremistas, ninguna ideología es lo suficientemente importante como para arrebatar la vida de un ser humano. 

EL LIBERTINAJE DE LOS MEDIOS DE PRENSA. Charlie Hebdo se burló de una ministra francesa negra retratándola como una mona, caricaturizó “follando” a los tres componentes de la trinidad, pariendo a la virgen maría, caricaturizó iconos de la fe judía, apoyó activamente las acciones armadas en medio oriente, los bombardeos en Libia, Irak y el fallido bombardeo en Siria, se estaba convirtiendo en un medio de prensa molesto para diversas figuras políticas francesas y tenía innumerables líos judiciales tanto con organizaciones religiosas como con personas individuales, ¡Ah sí! Y también dibujó a Mahoma. Un medio que como muchos, se valía del sentimiento antiárabe y el sensacionalismo para vender más. Vamos, como cualquier diario chicha, Laura Bozzo, combate o Magaly T.V. cualquier cosa, aunque sea lamer axilas o chupar falos, con tal de tener audiencia o apoyar convenientemente al mecenas de turno. Estropicios mil, que nos tenemos que tragar por mantener la libertad de expresión, y cuyo antídoto no es ni el acribillamiento, ni la censura, ni la persecución, sino la educación en tu cabeza y el mando a distancia en tus manos para cambiar de canal. Todo actor mediático debe saber que hay un límite, y que cuando te burlas de la fe, de la cultura, de las creencias o promueves el racismo, estás transgrediendo la esencia misma del ser humano. ¿Cómo habríamos reaccionado nosotros, si Charlie Hebdo nos hubiera caricaturizado como llamas, hubiera hecho apología de Abimael Guzmán o hubiera dibujado follando a nuestros incas?

TODO ES CULPA DE LOS MUSULMANES: Quien empuña un fusil y acribilla a otra persona, no es ni cristiano, ni budista, ni ateo, ni musulmán, es simplemente un EXTREMISTA. A quienes dicen que todo musulmán es “terrorista”, tengo que recordarles que quienes mataron a más de 6 millones de indígenas en América eran cristianos católicos con los sacramentos completos. Que en República Centro Africana son los cristianos los que matan musulmanes, un conflicto en el cual Francia está metida hasta las cejas como U.S.A en Afganistán. Que fueron cristianos los cruzados que asesinaron brutalmente a los árabes “infieles” en su lucha por tierra santa. Que eran cristianos ortodoxos los mismos que asesinaban al pueblo ruso de hambre y en esclavitud antes de 1917. Y que el billete de a dólar dice “In god we trust” (En Dios confiamos) y en su nombre se lanzan bombardeos inhumanos contra pueblos árabes inocentes. Ya es hora de separar a los musulmanes, una fe y un Dios pacífico de la demencia fundamentalista y extremista. 

UNA GRAN PARTE DEL MUNDO TOTALMENTE HARTA DEL SISTEMA: Cuando matan a madres, hijos, hermanos, padres y abuelos; cuando te echan de tu casa y tienes que abandonar el barrio en que viviste, la ciudad donde creciste y a tus muertos donde los enterraste; cuando bombardean la ciudad que les da la gana; cuando pasas hambre, sed, frío, y te ves a ti mismo y a tus hijos condenados a la miseria de por vida, tan sólo porque en Texas casi no queda petróleo; cuando la gente vota por el líder que cree que los defenderá, pero éste es comprado por los grupos de poder capitalista o le dan golpe de estado vía revolución de colores financiadas desde occidente; cuando todo falla, tan sólo es cuestión de tiempo para que algún loco, descontextualice e interprete a su criterio cualquier escrito sagrado y empuñe las armas en nombre de cualquier creencia, Dios o ideología. Vamos que Dios no tiene la culpa, hasta la religión de Maradona podría tomar las armas si les tocan demasiado las pelotas. 

DUDAS RAZONABLES EN LA SEGURIDAD Y EL ATAQUE A CHARLIE HEBDO: el semanario ya había sido objeto de varios atentados, previamente habían incendiado sus instalaciones, recibían constantes amenazas y supuestamente tenían protección policial, un guardaespaldas para proteger a todo un diario, los terroristas entraron como en su casa con dos fusiles de guerra, perpetraron la matanza y en lugar de inmolarse huyeron, asesinaron a un policía árabe (que tuvo la mala suerte de cruzarse en su camino), sí árabes asesinando árabes, y “se olvidaron la documentación personal en el vehículo en el cual fugaban” (Iban a un atentado mortal y ¿Llevaban documentación?), el agente policial encargado de la investigación se ha suicidado, y su antecesor también se suicidó. Luego, la confusión, atentados con bombas contra una mezquita, otra policía acribillada, dos o hasta tres lugares donde secuestraron rehenes, 4 rehenes muertos y supuestamente los tres terroristas acribillados. Lo que sí era claro, al menos para los medios masivos, desde el primer segundo era que “de todas formas” era un ataque de “islamistas”, aunque Al qaeda se ha regocijado, ninguna facción radical aún se ha atribuido el ataque.

LA DOBLE MORAL OCCIDENTAL Y EL 11S FRANCÉS: tenemos que tener en cuenta que lo que ha ocurrido no es la causa, sino el efecto, por ejemplo, de enviar y armar milicias contra el gobierno Sirio, desde toda Europa han acudido prestos y con la bendición inicial de sus gobiernos numerosos yihadistas, que ahora regresan con preparación y experiencia en combate, los buenos combatientes, que se convierten en el demonio nada más pasar la frontera con Irak, donde la coalición occidental con la venia de la liga árabe combate a los mismos radicales con el nombre de Estado Islámico, ¡Los mismos son malos o buenos dependiendo de qué lado de la frontera estén luchando!. El atentado llega en un momento muy bajo de liderazgo político por parte del gobierno de B. Obama, varios países lo acompañan a regañadientes en su guerra y la OTAN se ha negado a participar de la misma, no obstante desde el primer disparo en París, Washington ya llamó a la respuesta “global”. Haríamos muy bien en desconfiar, no sólo porque nunca se encontraron las armas de destrucción masiva en Irak, ni se ha probado fehacientemente que Al qaeda hubiera organizado el ataque del 11S, sino sobre todo, porque más fuego en este incendio no hará más que empeorar la ya difícil situación y las relaciones entre árabes y occidentales.